Este no es el típico blanco de verano. Bajo Velo es complejo, salino, y pide comida con estructura. Nos fascinó su equilibrio entre la tipicidad de la Verdejo y esa alma jerezana que le da el velo. Lo elegimos porque es distinto, porque propone y porque no pasa desapercibido. Un vino para explorar y sorprender.
Variedad: 100% Verdejo
Alcohol: 13.5%
Zona: D.O. Rueda, Castilla y León, España
Viñedo: Verdejo de 80 años
Crianza: 10 meses en botas de Jerez sin lavar, bajo velo
Temperatura de servicio: 10–12 ºC
Vista: Amarillo pálido con reflejos dorados.
Nariz: Flor blanca, fruta de hueso, almendra y un matiz yodado muy característico del velo.
Boca: Untuoso, salino, denso y balsámico. Final largo con buena acidez.
Tiradito de bonito con aceite de ajonjolí y alcaparras: La grasa del bonito y el umami del ajonjolí resaltan la textura densa del vino, mientras que las alcaparras hacen eco de su fondo salino y yodado.
Caballa en escabeche suave con hinojo: La acidez del escabeche se funde con la frescura del vino, y la intensidad de la caballa se equilibra con su volumen y personalidad jerezana.
Arroz meloso de setas y queso Idiazábal: El umami de las setas y la grasa del queso potencian la untuosidad del vino, y su carácter salino limpia el paladar entre bocado y bocado.
Queso Comté de 18 meses: La complejidad del Comté conversa con la crianza bajo velo, mientras su textura cremosa y notas de nuez se reflejan en el final largo del vino.
Tarta tatin de manzana con salvia: La fruta cocida y el toque herbal de la salvia dialogan con las notas balsámicas y de fruta de hueso del vino, en un cierre inesperado y elegante.
4.1 ★★★★☆ (623)
4.1 ★★★★☆ (623)
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