En el corazón de la Ribera del Duero, se encuentra Bodegas y Viñedos El Lagar de Isilla, un lugar donde la historia, la familia y el vino se entrelazan para crear una experiencia enológica única. Situada en La Vid, a escasa distancia de Aranda de Duero, esta bodega se alza como un emblema de la tradición vinícola burgalesa, avalada como la mejor región vitivinícola del mundo en 2012.
Todo comenzó en una bodega histórica del siglo XV, oculta bajo el restaurante El Lagar de Isilla en Aranda de Duero, donde la familia Zapatero Pinto dio sus primeros pasos en el mundo del vino. Su éxito fue tal que decidieron expandirse, trasladando su pasión y savoir-faire al complejo enológico de La Vid, heredando el encanto de una finca colonial de 1890.
Con 40 hectáreas dedicadas al cultivo, principalmente de la variedad Tempranillo, esta bodega también abraza el Cabernet Sauvignon y el Merlot, reflejo de su compromiso con la diversidad y la calidad. La vendimia manual y una meticulosa selección en bodega subrayan su filosofía de respeto por la tierra y sus frutos.
El Lagar de Isilla produce vinos tintos y parcelarios que expresan la esencia de cada rincón de sus tierras. Dos marcas distintivas, El Lagar de Isilla y El Lagar de Isilla 9 meses Gestación, cuentan la historia de una bodega que, con cada sorbo, invita a descubrir los matices de la Ribera del Duero.