Más playero que la sombrilla
Un vino blanco que va bien con todo. Ligero y fresco perfecto para la playa con aromas amielados y a flores blancas, la combinación perfecta de frescura y dulzura.
Cepas: 100% Macabeo
Recíbelo en 24 horas, de Lunes a Sábado.
Delívery gratis a partir de S/. 350
La Rubia Blanco, ¡un vino para disfrutar bajo el sol! Con cada sorbo, te vas a sentir como si estuvieras en la playa, con esa brisa marina acariciando tu cara y el sol dándote un abrazo dulce. Es de esos vinos que, a pesar de su ligereza, te dejan queriendo más porque cada copa está repleta de balance y placer.
Este vino, hecho 100% de Macabeo, es un verdadero espectáculo de aromas y sabores. Te va a encantar cómo los aromas amielados se mezclan con ese toque floral, dándote una frescura que no pesa, sino que invita a otro trago. Y ni hablar de cómo se siente en la boca: fresco, ligero y con esa dulzura que no empalaga, sino que se desvanece suavemente, invitándote a seguir disfrutando.
Para los días calurosos, este vino es un acierto seguro. Imagínate un picnic en la playa o una tarde relajada en la terraza, La Rubia es la compañía perfecta. Y en cuanto a maridaje, la variedad aquí es amplia: desde mariscos y pescados ligeros, que resaltan su carácter marino, hasta ensaladas frescas que complementan su perfil aromático. Y si te gustan los platos un poco especiados, este vino puede manejarlo, siempre y cuando no sean demasiado picantes. Los quesos suaves, como el feta o la mozzarella, también son una gran elección para acompañar.
Variedades: 100% Macabeo de perfil aromático distintivo con una frescura vibrante.
Viñedos: Vides de 10 años en la meseta de Murcia, entre 500 y 900 metros de altitud, donde la oscilación térmica diaria es clave para la calidad de la uva. Suelos arenosos limosos con caliza del Plioceno y un clima continental seco, con marcadas diferencias de temperatura y escasas lluvias, lo que concentra los sabores en la uva.
Elaboración: Selección rigurosa de la uva, prensado suave y fermentación a 15°C para resaltar la frescura y la pureza de la fruta.
Temperatura de servicio: Se disfruta mejor en una temperatura entre 8 y 10 °C.
Vista: Color brillante con reflejos dorados que capturan la luz.
Nariz: Aromas amielados intensos seguidos por notas de flores blancas.
Boca: Fresco, ligero y goloso, una dulzura bien integrada que se disipa suavemente.
Mariscos y pescados ligeros: Prueba con camarones a la parrilla, ceviche o un lenguado al horno. Los sabores delicados del mar se armonizan con la frescura y las notas florales del vino.
Ensaladas frescas: Opta por ensaladas con ingredientes como pera, manzana verde, y nueces. Agrega un aderezo ligero de miel y mostaza que empareje con las notas amieladas del vino.
Platos vegetarianos: Un quiche de espárragos o una tartar de aguacate pueden ser opciones maravillosas.
Comidas condimentadas (ligeramente): Si te inclinas por algo con un toque especiado, prueba con platos tailandeses o vietnamitas que no sean excesivamente picantes, como un pad thai de verduras o rollitos de primavera frescos.
Quesos suaves: Quesos frescos o de pasta blanda como el feta, mozzarella o un queso de cabra joven serán compañeros ideales para La Rubia, ya que su textura cremosa y sabores suaves complementan la acidez y frescura del vino.
Bodegas La Purísima, ubicada en la región de Yecla, es una bodega que combina tradición e innovación en su enfoque hacia la vinificación. Con 3325 hectáreas de viñedos, que representan aproximadamente el 60% de la extensión de la D.O. Yecla, la bodega se destaca en la producción de vinos de calidad. Entre sus viñedos, más de 100 hectáreas son de viñedos de Pie Franco de Monastrell, una variedad autóctona que ha crecido en la tierra de forma natural, reflejando la esencia de su terruño. Además de Monastrell, también cultivan variedades como Airén, Tempranillo, Merlot, Cabernet Sauvignon y Syrah.
La Purísima mantiene la tradición y calidad de sus vinos a través de técnicas de selección masal, en las que los agricultores seleccionan personalmente las cepas para plantar nuevas vides. Este enfoque refleja un compromiso con la continuidad de las prácticas tradicionales y la calidad de sus vinos.
En línea con su compromiso con la sostenibilidad, Bodegas La Purísima también se dedica a la agricultura ecológica, evitando el uso de productos químicos tóxicos, abonos, pesticidas y herbicidas. Este enfoque ecológico se refleja en vinos como Old Hands Roble y Joven, ambos elaborados con uvas procedentes de agricultura ecológica y certificados por el Consejo de la Agricultura Ecológica de la Región de Murcia.
El equipo de la bodega se dedica a elaborar los mejores vinos de Yecla, lo cual se refleja en el prestigio y los numerosos premios nacionales e internacionales que han obtenido.
La D.O. Yecla, donde se sitúan los viñedos de Bodegas La Purísima, se encuentra en el Altiplano Murciano, a una altitud que varía entre los 500 y 900 metros. Esta región es conocida por su diversidad orográfica, con sierras orientadas de noreste a sureste y suelos originados principalmente a partir de sedimentos del plioceno. Estos suelos básicos, con un pH medio de 8 y bajos en materia orgánica, limitan el vigor de la viña, lo que resulta en vinos concentrados.
El clima en Yecla es de tipo continental seco, caracterizado por veranos muy cálidos, con temperaturas que pueden alcanzar los 39ºC, e inviernos fríos, con temperaturas que llegan a -10ºC. Las precipitaciones son escasas y se concentran principalmente en primavera y otoño. Este clima da origen a vinos con carácter, color y sabor intensos
El terroir de Yecla, donde se encuentran los viñedos de Bodegas La Purísima, influye significativamente en las características de sus vinos, aportando cualidades únicas que son el resultado de la interacción entre el clima, el suelo y las variedades de uva cultivadas.
Clima Continental Seco: El clima de Yecla, con veranos calurosos y secos e inviernos fríos, contribuye a un ciclo de crecimiento de la vid intenso. En verano, las altas temperaturas y la escasez de lluvias concentran los azúcares y los compuestos aromáticos en las uvas, mientras que las noches frías ayudan a preservar la acidez. Esto resulta en vinos con sabores intensos y bien definidos, un equilibrio de dulzura y acidez, y un alto contenido alcohólico.
Suelos Básicos y Pobres: Los suelos de la región, con un pH básico y bajos en materia orgánica, limitan el vigor de la vid. Esto conduce a un menor rendimiento por viña, pero las uvas que se producen son de mayor calidad, con una mayor concentración de sabores, color y taninos. Los vinos resultantes suelen ser más estructurados y con mayor potencial de envejecimiento.
Variedades de Uva Adaptadas: La Monastrell, la variedad estrella de Yecla, se adapta excepcionalmente bien a este clima y suelo. Soporta el calor y la sequía, lo que da como resultado vinos con un fuerte carácter varietal, ricos en color y con sabores intensos de frutas maduras. La presencia de viñedos viejos de Monastrell de Pie Franco añade una dimensión de complejidad y profundidad a estos vinos.
Otras Variedades Cultivadas: Además de la Monastrell, la presencia de variedades como Syrah, Tempranillo, Airén, Cabernet Sauvignon, entre otras, permite a Bodegas La Purísima ofrecer una amplia gama de vinos. Cada variedad aporta sus características distintivas, lo que permite crear vinos con perfiles únicos. Por ejemplo, el Syrah aporta notas especiadas y de frutos negros, mientras que el Tempranillo ofrece sabores más terrosos y de frutos rojos.