Catadores de Vino y Sommeliers: Parecidos y Diferencias

Hoy vamos a explorar el fascinante mundo de los catadores de vinos, esos héroes anónimos del buen beber.

Primero, ¿qué es un catador de vinos? Bueno, imagínate a alguien que se dedica a probar vinos y analizar sus sabores, como si fuera un detective del gusto. Estos expertos trabajan en diferentes etapas del vino, desde su producción hasta su disfrute final. Y no es un trabajo fácil, ¿eh? Pocos se dedican a tiempo completo, pero vaya que es un empleo soñado para muchos.

Los catadores pueden formar parte de comités de denominaciones de origen, juzgar en concursos de vinos (¡sí, esos eventos donde los vinos compiten como en las Olimpiadas!), trabajar para guías independientes o revistas especializadas. Su tarea es clave para ayudarnos a descubrir esos vinos que nos harán decir "¡guau!".

¿Y cómo se cata? Bueno, en los concursos se hace a ciegas, pero en las guías no tanto, porque ahí lo que importa es que el vino represente bien su región. La cata técnica, por otro lado, es más detallada y ayuda a mejorar los vinos.

Ahora, ¿cómo te conviertes en catador? No hay un camino único, pero sí mucho estudio y práctica. Los cursos avanzados en escuelas de cata, como el Wine School and Education Trust (WSET) en Inglaterra, son un buen punto de partida. Eso sí, prepara tu bolsillo, porque no es barato.

¡Pero espera! ¿Son los catadores infalibles? Un estudio reciente puso en duda su objetividad, mostrando que incluso los profesionales pueden ser influenciados por factores como el cansancio o las condiciones ambientales. Así que, aunque son importantes, recuerda que al final, tu propio gusto es lo que cuenta.

Y hablando de especialistas en vinos, ¿qué tal un sumiller? Son los expertos en vinos que te encuentras en los restaurantes, ayudándote a elegir el mejor vino para tu comida. Estos profesionales también deben conocer de café y puros, y su trabajo es tanto de conocimiento como de servicio. ¡Todo un arte!

Para ser sumiller, también hay que estudiar y practicar mucho. Algunos programas duran de 1 a 2 años, pero el aprendizaje nunca termina. Y no todos los que sirven vino son sumilleres, ¡ojo!

Por cierto, ¿sabías que hay catadores de café y chocolate también? Sí, en serio. Estos profesionales usan sus sentidos para evaluar desde el aroma hasta la textura de estas delicias. ¡Imagina dedicarte a probar chocolate todo el día!

En resumen, el mundo de la cata es tan complejo como fascinante, lleno de sabores, aromas y texturas para explorar. Ya sea vino, café o chocolate, hay un arte detrás de cada sorbo o mordisco que nos lleva a un viaje de sensaciones.

A continuación encontrarás respuestas a las preguntas más frecuentes sobre catatodores y sommelieres. ¡Salud por ellos!

¿Qué es un catador de vinos?

En los concursos de vino y grandes eventos también se emplea catadores de vino para determinar cuales son galardonados con medallas de oro u otros reconocimientos. Aquí es usual formar paneles de cata con personas más o menos preparadas en el arte de catar vinos, pero que de alguna manera se consideran representativos del público en general (por ejemplo periodistas, chefs, etc).

Las guías independientes también emplean catadores de vinos. Aquí los catadores de vino suelen trabajar más o menos a tiempo completo (a veces el equipo central es apoyado por expertos regionales en cada zona) debido a que se busca tener uniformidad de criterios dentro de la misma guía.

Otro tipo de catador de vinos es el que trabaja para las revistas especializadas. Aquí realizan una labor de divulgación y su trabajo consiste más bien en acercar los vinos a los consumidores.

Como puedes ver, los perfiles de catadores son muy variados. Pocos se dedican a esta actividad a tiempo completo.

¿Qué se necesita para ser un catador de vinos?

Un catador de vinos requiere ser muy meticuloso y poder evaluar las características de cada vino separadamente. En las hojas de puntuación, te preguntan por características específicas. No vale el decir “este vino me gusta” o “está bueno”. Hay que fijarse en cada parámetro del vino por separado y esto requiere un gran entrenamiento para poderlo hacer bien.

¿Que se estudia para ser catador de vinos?

No existe una norma que diga exactamente lo que tienes que estudiar. Muchos enólogos, periodistas o sommelieres actúan de facto como catadores de vino. Dicho esto, un catador de vino profesional probablemente haya seguido cursos avanzados en una escuela de cata profesional, como podría ser por ejemplo el Wine School and Education Trust (WSET) de Inglaterra.

Puestos a ser exigentes, se esperaría de un catador de vinos que al menos tenga la certificación WSET Advanced (Nivel 3) y preferiblemente el Diploma (WSET nivel 4). Estos son programas bastante largos y costosos con lo que no se encuentran al alcance de todos.

Una visión crítica: ¿Catadores o Timadores?

Un estudio reciente en el Journal of Wine Economics cuestiona la objetividad de los catadores de vino. Se descubrió que, a pesar de la capacidad de un consumidor ocasional de distinguir entre un vino joven y un reserva, los sumilleres profesionales solo coincidían en sus valoraciones en un 10% de las veces. Este resultado surge de un experimento realizado en la Feria Estatal de Vino de California, donde el mismo vino se presentó a los catadores en botellas diferentes, revelando variaciones significativas en la puntuación.

La investigación muestra que las valoraciones de vinos no son tan precisas como se podría esperar. Factores como las condiciones ambientales y la fatiga del paladar influyen en el juicio de los sumilleres. Además, otro estudio por el psicólogo Richard Wiseman de la Universidad de Hertfordshire encontró que los expertos a menudo no pueden diferenciar vinos económicos de los costosos en catas a ciegas, sugiriendo un fuerte componente psicológico en la valoración del precio.

La complejidad en la cata de vinos se debe a la presencia de más de 400 compuestos aromáticos, muchos de los cuales son perceptibles solo en condiciones específicas. Esta complejidad y las limitaciones humanas en la detección de sabores y aromas sugieren que una cata objetiva es prácticamente imposible.

Como resultado, crece la tendencia a considerar las opiniones de los expertos en vino como indicativas, pero no definitivas. La cata de vinos sigue siendo una mezcla de habilidad y percepción subjetiva, y mientras no se desarrollen herramientas más precisas, los análisis de los sumilleres profesionales serán la principal guía en la clasificación de los vinos. Sin embargo, se hace evidente que incluso los expertos más entrenados están sujetos a la subjetividad y a influencias externas en sus valoraciones.

¿De donde viene la palabra sommelier?

Viene de “sumer – sumere” que signficia absorber un líquido. Recordemos que una de las funciones iniciales de los summileres era probar los vinos para ver si estaban en capacidad de ser bebidos o por el contrario eran tóxicos y tenían que ser descartados.

¿Qué es un Master Sommelier?

Un maestro sumiller es el nombre que se les da a los sommelieres que han realizado estudios en la Court of Master Sommeliers y terminado el nivel más alto de certificación.

Además de los estudios, estos programas requieren que el sommelier sea muy ducho en el manejo de vinos y copas. Para esto las pruebas suelen ser muy duras e incorporan habitualmente un componente de estrés (que el cliente no está contento o hace preguntas molestas).

Se busca ver como reacciona nuestro sommelier a situaciones comprometidas y valorar su capacidad de actuar bajo presión. En muchos casos estas pruebas dan lugar a anécdotas debido a situaciones muy curiosas y quizá algo jaladas de los pelos.

¿Cuántos años dura la carrera de sommelier?

Es difícil dar una medida concreta pues un sommelier continúa aprendiendo sobre vinos durante su vida laboral. Lamentablemente los estudios de sommeliería no están normados y hay que evaluar más las aptitudes personales y la experiencia profesional del sommelier.

Existen programas básicos de 1 a 2 años que proporcionan al sommelier un fundamento muy interesante para continuar aprendiendo. También existen cursos aún más rápidos de 6 meses que le dotan de los instrumentos básicos.

Mientras más preparado esta el sumiller, podrá lógicamente acceder a posiciones en restaurantes y bares de vino de mayor prestigio. Asimismo no todo el que te sirve un vino merece ser llamado sommelier.

Cuando un sommelier comienza a acceder a niveles avanzados internacionales como la Court of Master Sommeliers o el WSET de Inglaterra, usualmente ya tiene varios años de trabajo como sommelier y la formación básica la ha realizado en otro lado. Estos programas son más como un “Master” en vinos.

Catadores de café

Los catadores de café, esos magos del paladar, tienen un mundo entero por explorar en cada grano. Vamos a sumergirnos más en este viaje aromático.

Primero, hablemos un poco más del café verde. Este no es el café que te sirven en la mañana. Es el estado natural del café, antes de ser tostado. Los granos verdes son la base de todo el café que disfrutamos, y su calidad es crucial para determinar el sabor del café final.

Los catadores de café, también conocidos como "cuppers", tienen una tarea compleja y delicada. No solo identifican aromas y sabores, sino que también evalúan la calidad general del café. Aquí van algunos detalles:

1. Proceso de Cata: La cata de café implica un proceso meticuloso. Los catadores suelen seguir un protocolo estándar para asegurar que la evaluación sea justa y precisa. Esto incluye la preparación del café de manera uniforme, usualmente a través de un método de infusión específico.

2. Identificación de Defectos: Además de detectar los sabores y aromas deseables, los catadores están entrenados para identificar defectos en el café. Esto puede incluir sabores rancios, quemados o incluso la presencia de sabores extraños que pueden ser resultado de malas prácticas en el cultivo o procesamiento.

3. Perfilado de Sabores: Cada región cafetalera produce granos con perfiles de sabor únicos. Los catadores deben ser capaces de identificar estos perfiles y atribuirlos a su origen geográfico. Es casi como ser un detective del café, ¡descifrando los secretos de cada grano!

4. Conocimiento del Proceso: Entender cómo el procesamiento afecta el sabor es esencial. Esto incluye saber cómo los métodos de secado, fermentación y tostado cambian las características del café. Un buen catador entiende la ciencia detrás de cada taza.

5. Calidad del Agua y Temperatura: El agua utilizada en la cata y su temperatura pueden alterar significativamente la percepción del sabor. Por eso, se presta especial atención a estos factores durante el proceso de cata.

6. Evaluación Consistente: Para ser efectivos, los catadores de café deben ser consistentes en sus evaluaciones. Esto requiere un entrenamiento riguroso y mucha práctica, además de una paleta muy desarrollada.

7. Comunicación de Resultados: Parte del trabajo de un catador es comunicar sus hallazgos de manera clara y útil. Esto puede influir en decisiones de compra para tostadores y distribuidores, así como proporcionar retroalimentación valiosa a los productores.

8. Desarrollo Continuo: Como en el mundo del vino, el mundo del café está en constante evolución. Esto significa que los catadores deben estar en continua formación y actualización sobre nuevas variedades, técnicas de procesamiento y tendencias del mercado.

En resumen, ser catador de café es una mezcla de arte y ciencia, donde cada sorbo cuenta una historia diferente. Es un viaje fascinante a través de aromas y sabores que requiere pasión, dedicación y, sobre todo, un gran amor por el café

Catadores de chocolate

¡Ah, el chocolate! Ese tesoro marrón que nos hace suspirar de felicidad. Los catadores de chocolate, esos virtuosos del cacao, tienen un trabajo envidiable, ¿verdad? Vamos a sumergirnos más en este dulce mundo.

Primero, entendamos que el chocolate no es solo una golosina; es un arte complejo. Desde la semilla del cacao hasta la barra final, hay un sinfín de factores que influyen en su calidad. Y aquí es donde entran nuestros héroes chocolateros.

1. Proceso de Cata: Al igual que el vino o el café, la cata de chocolate es un proceso serio y estructurado. Los catadores a menudo comienzan evaluando la apariencia del chocolate: su brillo, color y si tiene alguna imperfección superficial. Todo esto puede dar pistas sobre la calidad del procesamiento y almacenamiento.

2. Romper y Oler: Antes de probar, los catadores rompen el chocolate. Este simple acto libera aromas y da una primera impresión de la calidad del cacao. Aquí es donde entran en juego esos aromas frutales, florales, achocolatados y especiados.

3. Degustación y Análisis del Sabor: Al probar, los catadores permiten que el chocolate se derrita en la boca para apreciar completamente su sabor y textura. Buscan un equilibrio entre dulce, ácido y amargo, así como la identificación de sabores secundarios que pueden incluir notas de nueces, caramelo, frutas o especias.

4. Perfil de Textura: La textura es tan importante como el sabor. Los catadores evalúan la suavidad, cremosidad, si hay presencia de grumos o granos. Un buen chocolate debe derretirse de manera uniforme y suave en la boca.

5. Origen y Tipo de Cacao: Al igual que el café, diferentes regiones producen cacao con perfiles de sabor distintivos. Los catadores deben ser capaces de identificar estos perfiles y, a menudo, pueden incluso adivinar el origen del cacao.

6. Proceso de Elaboración: El proceso de fermentación, secado y tostado del cacao influye enormemente en el sabor del chocolate. Los catadores experimentados pueden detectar variaciones sutiles que resultan de diferentes técnicas de procesamiento.

7. Formación y Conocimiento Continuo: Los catadores de chocolate deben mantenerse al día con las tendencias de la industria y las técnicas de elaboración. Esto incluye entender las diferencias entre chocolates de comercio justo, orgánicos, de origen único, etc.

8. Comunicación y Educación: Además de catar, muchos catadores participan en la educación del público sobre el chocolate. Esto puede incluir organizar catas, escribir sobre chocolate y hablar sobre sostenibilidad y ética en la producción de cacao.

En resumen, ser catador de chocolate es explorar un mundo donde cada mordisco es una historia. Es un viaje a través de los sentidos, descubriendo el alma del cacao en cada tableta. Así que la próxima vez que disfrutes de un buen chocolate, recuerda todo el amor y la ciencia que hay detrás.